James MacDonald es el presidente del consejo regional de IB Asia-Pacífico y director del NIST International School de Tailandia. Queríamos conocer mejor la función del consejo regional y cómo su trabajo ayuda a los colegios, los educadores y los alumnos, e influye en la estrategia del IB.
¿Cuál es la función del consejo regional de IB Asia-Pacífico?
El consejo desempeña una importante función estratégica como grupo asesor del director de IB Asia-Pacífico, Ian Chambers. En la práctica, esto implica que además de ofrecer asesoramiento e información para ayudar a Ian, también contribuimos a la promoción del IB. Por ejemplo, en las dos últimas reuniones de primavera del consejo, celebradas en Japón en 2014 y en Tailandia en 2015, nuestros miembros se reunieron con delegados de alto rango del Gobierno de estos países. Hemos descubierto que el consejo puede ser un recurso muy útil para abrirle puertas al IB en distintas partes de la región.
¿En qué áreas principales se centrará el consejo en 2015?
Como órgano asesor, el consejo no se centra en las prioridades anuales concretas que identifica; son la dirección estratégica del IB y los avances de la región los que determinan principalmente la discusión. Algunos de los temas que se plantean con más frecuencia y de distintas formas incluyen el equilibrio entre el crecimiento y la calidad y cómo podemos ampliar el acceso educativo. Por tanto, y dado que nuestra última reunión tuvo lugar en Tailandia, podría decirse que el establecimiento de relaciones de alto nivel con el Gobierno tailandés era en cierto modo una de nuestras prioridades este año.
¿Cómo beneficia el trabajo del consejo a los colegios, los educadores y los alumnos de la región?
El IB es una gran organización con presencia en muchos países. No conozco ninguna otra organización educativa equiparable en términos de alcance y amplitud operativos. Y aunque la organización está llena de gente trabajadora y dedicada, no es el personal del IB el encargado de impartir directamente sus programas educativos, sino los docentes de los colegios en colaboración con el IB.
Un consejo que funcione eficazmente, formado por directores de colegio y miembros externos, es solo uno de los métodos que utiliza el IB para garantizar una relación estrecha entre la organización y quienes imparten directamente el currículo. Aparte de eso, el consejo también influye en la toma de decisiones. Creo que si el consejo regional puede ayudar al IB a tomar decisiones aún mejores y establecer relaciones aún más estrechas con los colegios, los que se verán beneficiados serán los educadores, los alumnos y las instituciones educativas de la región.
¿Qué es lo que más le gusta de pertenecer al consejo regional de Asia-Pacífico?
Lo mismo que me gusta de ser director de colegio: las personas. El consejo está lleno de individuos entusiastas, inteligentes, comprometidos y con unas trayectorias impresionantes. Durante las reuniones, no paro de aprender cosas nuevas y enfrentarme al desafío de contemplar una cuestión desde una perspectiva diferente. También creo que, en cierto modo, nuestro trabajo sirve de ayuda a la oficina regional y, como educador, considero que la posibilidad de ayudar y aprender al mismo tiempo hace que pertenecer al consejo regional se convierta en una experiencia extraordinaria.
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