Contribución de Stuart Crouch
Posibles formas de colaboración entre bibliotecarios y docentes en el continuo de programas del IB
Llevo 25 años en la docencia, de los cuales he ejercido de bibliotecario durante más de 16. Al principio de mi carrera, se auguraba un futuro muy oscuro para las bibliotecas escolares: todos los recursos estarían en línea, los libros desaparecerían y las bibliotecas cerrarían. Sin embargo, lo que ha sucedido es exactamente lo contrario. En el continuo de programas del IB, la importancia que han adquirido las habilidades de los enfoques del aprendizaje, como la gestión de la información y la alfabetización mediática en los currículos, ha conllevado una demanda de bibliotecarios sin precedentes.
El proyecto “Ideal Libraries”, dirigido por Pilar Quezzaire en el IB, es un testimonio reciente de que las bibliotecas son una herramienta fundamental para el éxito de los alumnos. Veamos cómo sería su aplicación práctica.
Por supuesto, se siguen realizando las actividades tradicionales. Los bibliotecarios trabajan con los docentes y los alumnos para garantizar que los fondos, ya sean electrónicos, impresos o audiovisuales, cumplan su cometido. De hecho, al contar con la participación de los alumnos para la selección de materiales, aumenta el sentido de propiedad de la biblioteca entre sus usuarios. La celebración de eventos como “la semana del libro”, “la semana de los libros prohibidos”, “el día mundial del libro” y otras muchas actividades interesantes, permite establecer vínculos entre el mundo real, la alfabetización y la gestión de la información.
Las estructuras y los hitos del IB representan áreas de trabajo importantes para los bibliotecarios. Imagine cómo se realizarían la exposición del Programa de la Escuela Primaria (PEP), el Proyecto Personal del Programa de los Años Intermedios (PAI), y la Monografía y las evaluaciones internas del Programa del Diploma (PD) sin el apoyo, la intervención, la enseñanza y los recursos de la biblioteca. Resulta evidente su importancia para ayudar a docentes, coordinadores, miembros del personal de dirección y bibliotecarios a garantizar una colaboración eficaz. Y cuando digo “eficaz”, no me refiero a las peticiones de última hora para que el bibliotecario dé lecciones sobre el uso de recursos, ni a remitir a los alumnos al bibliotecario para que les corrija los errores en las referencias bibliográficas. Una colaboración eficaz exige la planificación conjunta de las lecciones, la enseñanza en equipo y la responsabilidad compartida en lo que respecta a los resultados de los alumnos. Para lograr dicha colaboración, también es necesario que los docentes y bibliotecarios compartan la biblioteca, las aulas, los recursos y, sobre todo, su experiencia.
Biblioteca McWilliam (sexto a décimo año), International School of Düsseldorf
En el International School of Düsseldorf (ISD), la colaboración eficaz presenta múltiples facetas. Veamos algunos ejemplos. Trabajo con los docentes de humanidades en una unidad sobre el turismo. A lo largo de la unidad, estoy a disposición de los alumnos para ayudarlos a investigar, tomar notas, crear sus productos y trabajar juntos en la elaboración de bibliografías. El coordinador del PAI, el coordinador del Proyecto Personal y yo trabajamos conjuntamente en una serie de sesiones de presentación del Proyecto Personal, con la idea de que los alumnos acudan a nosotros cuando necesiten ayuda. Asimismo, imparto un curso sobre redacción académica con el coordinador del PD durante el primer año del programa.
Igualmente interesante me parece el número de bibliotecas que se están renovando. En el ISD, las bibliotecas del PAI y el PD se renovaron por completo durante el curso 2014-2015. Queríamos que siguieran siendo una parte fundamental del colegio. A partir de una serie de investigaciones, visitas a bibliotecas públicas de Alemania, encuestas a gran escala a alumnos y miembros del personal, y un amplio proceso de planificación, diseñé espacios de aprendizaje adaptables a las necesidades de diversos grupos de alumnos. Gran parte del mobiliario de la biblioteca McWilliam se puede mover fácilmente, de modo que cuando utilizamos el espacio para la exposición del Proyecto Personal el año pasado, la distribución de la biblioteca era muy diferente durante las sesiones de la mañana. Y solo 15 minutos después de que se presentara el último proyecto, habíamos restaurado la distribución habitual y reanudado el servicio bibliotecario.
Pero eso no es todo. Los bibliotecarios se encuentran en una posición privilegiada para ejercer de líderes y ser innovadores en el ámbito del desarrollo profesional. Durante los últimos años en el ISD, he trabajado con los docentes para introducir libros en formato electrónico en el currículo, y actualmente colaboro con los profesores de Educación Física y para la Salud, dentro de una comunidad profesional de aprendizaje, a fin de optimizar la cobertura y el uso de los recursos de la biblioteca en el currículo de la asignatura.
A modo de resumen, podemos decir que todo se basa en las relaciones. Las bibliotecas y los bibliotecarios no son eficaces de manera aislada. Si aceptamos que los colegios son microcosmos que reflejan la sociedad, y si la sociedad está cada vez más interrelacionada y globalizada, los colegios en los que afloran relaciones entre las bibliotecas y todos sus usuarios solo pueden representar un avance positivo.
Que disfrute leyendo.
¿Desea obtener más información sobre la función de las bibliotecas y el bibliotecario?
El 20 de enero de 2016, Stuart y su compañera bibliotecaria, Courtney Moore, presentarán en inglés un seminario web gratuito en Follett (Building your Library to support inquiry led learning and the three programmes of the International Baccalaureate). El seminario web supone una colaboración entre Stuart y Courtney, y el IB y Follett, el canal de distribución exclusivo de los materiales y artículos del IB.
Stuart Crouch es director de las bibliotecas de secundaria del International School of Düsseldorf (Alemania).