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Mirar hacia el futuro y destacar

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El Programa del Diploma ayuda al Tonbridge Grammar School y a sus alumnos a crecer y a alcanzar su máximo potencial.

Un entorno mayoritariamente para alumnas plantea una serie de desafíos especiales para un colegio. A muchas jóvenes les falta confianza en sí mismas, y por eso la respuesta que ofrece el Tonbridge Grammar School, en la localidad de Tonbridge (condado de Kent, Reino Unido), es ofrecer el Programa del Diploma. “Creemos que el Programa del Diploma ofrece a los alumnos la oportunidad de alcanzar su máximo potencial, ya que deben superar los desafíos que les plantea”, indica Pauline Bullen, subdirectora del colegio. “Se trata de un programa ambicioso que prepara a los alumnos para tener éxito en la universidad y en su vida posterior”. Bullen explica que los exalumnos son conscientes de que son personas capaces que han concluido un programa académicamente exigente.

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Asimismo, añade que además de desarrollar el conocimiento académico, el PD ayuda a desarrollar habilidades e inteligencia emocional: “No se trata solo de una titulación, sino de un programa con una filosofía”.

Sin embargo, pasar de ofrecer los A-levels y el PD a ofrecer solo el PD no fue tarea fácil. El colegio tuvo que superar la falta de conocimiento sobre el Bachillerato Internacional, interactuar con los padres que querían quedarse con el sistema nacional que conocían, y abordar la percepción de que el PD es más difícil que los A-levels. Al principio, solo había entre 30 y 40 alumnos en las clases del PD, ya que la mayoría continuó eligiendo los A-levels.

Tanto entonces como ahora, el Tonbridge Grammar School se ha valido de los datos disponibles para luchar por el PD. Durante el período en que ofrecía los A-levels y el PD simultáneamente, el colegio llevó un registro del índice de aceptación de los alumnos por parte de las universidades: a aquellos alumnos que no consiguieron obtener las notas necesarias en los A-levels los admitieron en las universidades en menor medida que a los alumnos del PD a los que les faltaban uno o dos puntos, explica Bullen. De hecho, la subdirectora afirma que, ahora que solamente se ofrece el PD, la amplia mayoría de alumnos del Tonbridge Grammar School accede a la universidad que eligieron como primera opción.

Según Bullen, ser un Colegio del Mundo del IB proporciona una identidad claramente diferenciada en una zona en la que hay muchos buenos colegios que ofrecen los A-levels, lo cual ayuda a atraer a alumnos. Actualmente el colegio cuenta con unos 300 alumnos en el PD. En las reuniones con los padres y en sus herramientas de marketing, el Tonbridge Grammar School destaca que el programa “ofrece una experiencia curricular más completa”. A los padres y los alumnos se les habla sobre el gran hincapié que se hace en el desarrollo como personas y en servir a comunidades locales y globales, sobre la atención que se presta a la investigación en áreas de interés de los alumnos, y sobre la relación con un mentor que forma parte de la realización de la Monografía, que es similar al enfoque del trabajo académico en la universidad. Como explica Bullen, “estos elementos ayudan a madurar a los alumnos”.

Además, también afirma que hay otros rasgos distintivos del programa. En concreto, destaca el equilibrio que aporta el hecho de cursar tres asignaturas de Nivel Superior (obteniendo así una profundidad de estudio) y tres de Nivel Medio (lo que ofrece una amplitud de estudio); la relación del contenido de los cursos con listas de lectura de ámbito mundial y su pertinencia; la preparación para todas las carreras profesionales y empleos; la coherencia del programa y su atención en el proceso; el desarrollo de los atributos del perfil de la comunidad de aprendizaje del IB; y la coherencia de los componentes troncales y el curso de Teoría del Conocimiento, un curso que, según la subdirectora, desarrolla el pensamiento de orden superior.

Como es lógico, los padres tienen preguntas. “La mayoría de las preguntas sobre el PD se centra en el contexto local y nacional de especializarse pronto y en ser capaz de tomar decisiones específicas”, aclara Bullen. Dado que muchos alumnos de Reino Unido esperan concretar los cursos que eligen a los 14 y los 16 años, culturalmente existen “dudas e indecisión para comprender que se puede seguir teniendo al mismo tiempo profundidad y amplitud” en la educación. El objetivo del colegio es convencer a los padres de que se centren en la calidad del proceso de aprendizaje que conlleva el PD.

Al igual que los padres, los futuros alumnos suelen expresar sus inquietudes por el hecho de tener que elegir materias de los seis grupos de asignaturas del PD. Según Bullen, “tenemos que explicar que hay mucha flexibilidad”. Otro argumento convincente es lo bien que el PD prepara a los alumnos para la universidad: “Hay muchos profesores universitarios que tienen muy buen concepto de lo que los alumnos del PD son capaces de hacer y de las habilidades con las que llegan a la universidad”. El colegio considera que el hecho de finalizar el Programa del Diploma supone una gran ventaja. La subdirectora también afirma que los alumnos del PD están preparados para estudiar de forma independiente y saben cómo realizar una investigación académica y citar las referencias bibliográficas, algo que es importante no solo en las universidades, sino también en el mundo laboral.

Afortunadamente, todos los profesores del Tonbridge Grammar School creen en el Programa del Diploma. Bullen explica que, al principio, “la mayoría de los profesores que tenían dudas acabó convenciéndose. Ahora son conscientes de la libertad de elección disponible, valoran el enfoque del programa y ven la calidad del aprendizaje”. Además, añade que la buena comunicación y un liderazgo fuerte también resultaron de ayuda. En estos momentos, el colegio procura contratar a profesores que conozcan el IB o que respalden su funcionamiento. “A veces tenemos que convencerles de que también se pueden convertir en unos magníficos profesores del PD”, cuenta la subdirectora del colegio, y al final muchos profesores prefieren impartir el PD antes que los A-levels.

En pocas palabras, gracias a la conexión entre los seis grupos de asignaturas, Teoría del Conocimiento y los componentes troncales, Bullen asegura que “el PD es la mejor opción y también la más coherente de los itinerarios académicos a partir de los 16 años. Todo suma”.

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Los alumnos del Tonbridge Grammar School pueden elegir entre seis lenguas extranjeras para estudiar: francés, latín, italiano, japonés, mandarín y español. Son muchos los colegios que no ofrecen tanta
variedad, pero este lo hace por numerosos motivos.

La subdirectora Bullen considera que “no se puede ser un Colegio del Mundo del IB y no darle importancia a las lenguas. Siempre hemos sido muy fuertes en lenguas”. Bullen manifiesta que estudiar lenguas aumenta la confianza de los alumnos en sí mismos. Además, con el gran número de alumnos que llegan al Tonbridge Grammar School a los 16 años, tiene sentido ofrecerles el atractivo de una variedad de opciones.

“Estoy firmemente convencida de que una de las mejores cosas que se pueden hacer es aprender otra lengua”, concluye.

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