Contribución de Tamizh Ponni
Piense en esto. Las cosas que hace unas décadas solo existían en nuestra fantasía han cobrado vida en el presente gracias a la tecnología. La generación actual parece utilizar las herramientas tecnológicas sin esfuerzo. Somos testigos de cómo el desarrollo y la innovación van materializándose a un ritmo gradual, pero a la vez extraordinario, en los dispositivos que utilizamos.
Desde los grandes matemáticos que descifraron los códigos durante la guerra hasta los eminentes científicos que siguen buscando la posibilidad de crear otro universo, la tecnología se ha diversificado por iniciativa propia. Como educadores, sabemos a ciencia cierta que es muy importante mantenerse al día de los últimos avances tecnológicos. En parte, esto es así porque las habilidades de aprendizaje del siglo XXI (creatividad, colaboración, pensamiento crítico y comunicación) surgen de esas innovaciones y actualizaciones entre educadores y alumnos.
El impacto de la tecnología en la educación
“La tecnología no puede reemplazar a los docentes, pero los docentes que usan la tecnología sí pueden reemplazar a los que no la usan”. – Anónimo
La educación y la tecnología están hermanadas, y nos hemos dado cuenta de que la eficacia de la docencia mejora con el uso de la tecnología. Las diferentes herramientas de simulación disponibles en línea hacen que el aprendizaje sea más visual y satisfacen las necesidades de alumnos con diferentes estilos de aprendizaje, promoviendo el pensamiento y la reflexión entre las mentes jóvenes. Un concepto sencillo se explica mejor con la visualización y la acción que con la lectura. Como se suele decir: un buen docente es aquel que es capaz de mostrar y hacer las cosas de manera práctica para generar un aprendizaje perdurable en los alumnos. La colaboración en línea ha dado lugar a una comunicación constructiva entre colegios de todo el mundo, lo que a su vez ha propiciado una colaboración eficaz al conectar a alumnos y docentes a distancia. La tecnología ha impulsado la educación a través de esta conexión global.
La informática en la nube ha supuesto una revolución pedagógica, al ayudar a las comunidades de enseñanza y aprendizaje a compartir e intercambiar información en diversos formatos y tamaños a través de unidades y plataformas virtuales. Los exámenes han adoptado un nuevo formato con las modalidades de evaluación electrónica que facilitan las herramientas Web 2.0, las sesiones de desarrollo profesional y los cursos en línea cara a cara, y los portales de autoaprendizaje y capacitación certificada.
Las herramientas educativas como Google Apps for Education y Microsoft Office 365 para la Educación hacen maravillas al llevar el aprendizaje más allá del aula tradicional. Ahora que vivimos en una era digital, aprender a programar es una habilidad increíble que puede desarrollar las competencias creativas y de solución de problemas de los alumnos. Muchos padres me cuentan orgullosos que sus hijos manejan la tecnología con los ojos cerrados.
Los alumnos jóvenes experimentan y aprenden la personalización de los elementos principales y las técnicas para controlar el funcionamiento de un dispositivo en muy poco tiempo. “Fue mi hija la que me enseñó a cambiar el tono de llamada”, dijo un padre orgulloso, con su nuevo teléfono móvil HTC en la mano. La curiosidad de los alumnos no se estimula poniéndoles la tecnología en la mano; el verdadero éxito sobreviene cuando los enseñamos a manejar cualquier tipo de tecnología y a que creen tecnologías completamente funcionales por su cuenta.
El aprendizaje es un proceso que nunca acaba. Del mismo modo, el papel de la tecnología en la educación es muy amplio y cambiante. La tecnología no puede seguir tratándose como un área independiente; ha de ser una herramienta operativa que ayude a los alumnos a adoptar una actitud de aprendizaje durante toda su vida a través de la experiencia. Se han inventado y probado varias formas de controlar la tecnología mediante la inteligencia humana. La integración de la tecnología en la educación se presenta como la mejor manera posible de preparar a los tecnócratas para la gran revolución que les deparará el futuro. Además, en la actualidad hemos llegado a un punto en que no podemos prescindir de la tecnología y es el momento de darle difusión en todos los colegios del mundo.
Tamizh Ponni es la coordinadora de tecnología del Oakridge International School de Bangalore.
