Contribución de Sara Díaz, Coordinadora de CAS del International School of Bologna (Italia)
Los alumnos del Programa del Diploma (PD) suelen estar muy ocupados con sus estudios, reflexiones sobre la Monografía, presentaciones de Teoría del Conocimiento (TdC), tareas de evaluación interna y reuniones varias, y a veces les cuesta sacar tiempo para las reflexiones sobre Creatividad, Actividad y Servicio (CAS). Hasta el simple hecho de presentar pruebas de reflexión una vez cada dos semanas puede suponerles una gran carga de trabajo adicional. Las reflexiones sobre CAS son resúmenes y pruebas de actividades que permiten a los alumnos explicar, de manera meditada y sincera, lo que han aprendido hasta el momento.
En el International School of Bologna (Italia), recordamos a los alumnos que las reflexiones no tienen por qué presentarse en formato escrito, y que pueden adoptar otras formas, como exposiciones orales, imágenes, conversaciones con los asesores de CAS, etc. Sin embargo, los alumnos siguen mostrando preferencia por el formato escrito, pese a que para algunos exige más tiempo, y para otros quizás no sea la mejor manera de expresarse por falta de creatividad.
Muchos alumnos se desaniman y desconcentran, y tienen dificultades para comprometerse con CAS. Pueden olvidarse fácilmente de que el principal objetivo del programa no es el producto final, sino el camino que los lleva hasta él, es decir, el proceso y la reflexión. Siempre les digo: “Incluso los fracasos pueden ser algo positivo y dar buenos resultados si son objeto de una reflexión profunda”. Podemos encontrar oportunidades para reflexionar en todas partes.
Laboratorios de reflexión
Los educadores debemos recordarles a los alumnos que la creatividad es fundamental en nuestro día a día. En el International School of Bologna, capacitamos a los asesores de CAS para que estimulen la reflexión y fomenten un pensamiento profundo y crítico en los alumnos.
Tenemos un “laboratorio de reflexión” en el que analizamos las reflexiones de los alumnos y, de ser necesario, les recomendamos métodos diferentes. El año pasado, por ejemplo, durante una excursión de CAS de tres días por los Apeninos, organizamos laboratorios por las tardes para enseñar a los alumnos a utilizar diferentes formas de reflexión, como pueden ser citas, dibujos y haikus (poemas de tres líneas que representan una observación sobre un momento fugaz).
Es importante animar a los alumnos a explorar todas sus habilidades y a salir de su zona de confort. Según el psicólogo Howard Gardner, existen diferentes tipos de inteligencia, pero siempre debemos explorar distintos métodos. Esto guarda una estrecha relación con el primer objetivo de aprendizaje de CAS: “Identificar en uno mismo los puntos fuertes y las áreas en las que se necesita mejorar”.
Gráfico de reflexión
Con el objeto de ayudar a los alumnos a redactar sus reflexiones sobre CAS, he creado un gráfico para estimular la creatividad mediante la activación del lado analítico y creativo del cerebro. Los alumnos han venido usándolo eficazmente y he recibido respuestas muy positivas.
A continuación, podrá leer cómo funciona paso a paso. Los alumnos necesitarán papel y bolígrafo, y deberán tener presente su experiencia durante todo el proceso de reflexión.
Para que el proceso de reflexión no se convierta en una tarea engorrosa, conviene empezarlo cuanto antes. Anime a los alumnos a buscar las formas de expresión que mejor se adapten a ellos para que el proceso les resulte más sencillo y natural.
El proyecto de CAS del alumno del PD Gianandrea Gregori consistía en crear un entorno más respetuoso con el medio ambiente en el colegio. Durante el proceso, creó marcadores de páginas para los alumnos y trabajó con una residencia de ancianos para sembrar varias plantas.