Top Nav Breadcrumb - Spanish0

Los colegios responden al brote epidémico de la COVID-19 con soluciones virtuales

“Debido a la situación de emergencia por el coronavirus, muchos Colegios del Mundo del IB están utilizando con éxito el aprendizaje en línea para dar continuidad a la educación de los alumnos”, afirma Pilar Quezzaire, responsable de currículo del IB. En el primero de una serie de blogs, dos educadores comparten sus experiencias.

Schools respond to COVID-19 outbreak by going virtual

A causa del brote epidémico de la COVID-19 (coronavirus), los gobiernos centrales y locales de muchos países continúan ordenando el cierre de los colegios. En lugar de cesar las actividades educativas por completo, los colegios de la comunidad del IB han recurrido al aprendizaje en línea. Los resultados de sus esfuerzos son una muestra de la resiliencia y el ingenio de estos colegios, y han puesto a prueba el valor y la eficacia del aprendizaje, la enseñanza y el liderazgo en línea.

Aunque aún no se conocen los resultados finales de las soluciones en línea como respuesta a estas circunstancias, los colegios han constatado que hay aspectos positivos de este tipo de aprendizaje y enseñanza que pueden utilizarse en el futuro, una vez paliada la situación de emergencia.

Dos responsables de tecnología de Colegios del Mundo del IB en China hablan de los puntos positivos que les ha sorprendido encontrar.

Coordinación de docentes y alumnos

Cuando el Gobierno de China ordenó el cierre de los colegios debido al brote epidémico de la COVID-19, los alumnos y docentes de los Colegios del Mundo del IB Shanghai American School (SAS) y Western Academy of Beijing (WAB) estaban de vacaciones por el Año Nuevo chino. El personal docente y las familias estaban repartidos por el mundo y no podían regresar a China. Ambos colegios tuvieron que responder a la situación lo más rápidamente posible.

El equipo directivo del SAS implementó un programa de aprendizaje en línea de emergencia. Durante el proceso, descubrieron que sus alumnos y docentes residían en cinco continentes y 22 zonas horarias. Para el SAS, el primer desafío fue determinar cómo procurar suficiente tiempo de aprendizaje y enseñanza en línea para todos.

Alan Preis, director de tecnología, manifiesta: “Al principio, el aprendizaje era casi totalmente asincrónico (no en línea simultáneamente) porque suponíamos que el colegio iba a estar cerrado poco tiempo. Ahora hemos implementado más opciones de enseñanza sincrónica (grupos en línea al mismo tiempo). No obstante, el acceso equitativo es un gran problema debido a las zonas horarias; es casi imposible tener a todos los alumnos trabajando con un profesor al mismo tiempo”. El Plan de aprendizaje a distancia del Shanghai American School (en inglés) está en proceso de desarrollo, ya que el colegio debe permanecer cerrado más tiempo del que se esperaba inicialmente.

El SAS ha tenido que distribuir el tiempo de los docentes en diferentes zonas horarias. Para ello, se ha reducido el tiempo asignado para las reuniones y se han creando más conversaciones individuales con los alumnos y más momentos de enseñanza espontánea mientras estos realizan sus tareas. El equipo directivo del SAS ha quedado impresionado por lo bien que han respondido los docentes, a pesar de las tensiones que conlleva enseñar de una manera diferente y en un nuevo medio. “Los docentes obtuvieron el equivalente a cinco años de aprendizaje profesional en dos semanas”, añade Preis.

La Western Academy of Beijing (WAB) afrontó desafíos similares, como determinar cuándo y cómo podían coordinar a los docentes, alumnos, padres y tutores legales para garantizar de manera eficaz la continuidad de la enseñanza y el aprendizaje. Un aspecto al que se debió prestar especial atención fue cómo enseñar en línea a los alumnos más pequeños siguiendo los marcos curriculares del Programa de la Escuela Primaria (PEP) y del Programa de los Años Intermedios (PAI).

El colegio está utilizando métodos de aprendizaje audiovisual e interactivo para crear la sensación de un “colegio real” de una manera que sea manejable para los padres. Están pensando en cómo reducir la carga de trabajo de asistencia que recae en los padres y proporcionar, al mismo tiempo, una experiencia de aprendizaje que mantenga el interés de los niños y los padres, tal como afirma Stephen Taylor, coordinador del PAI y nuevo director de innovación en el aprendizaje y la enseñanza de la WAB.

Los docentes y el equipo directivo también tuvieron que examinar los indicios y considerar posteriormente cómo la recopilación de diferentes tipos de datos e información podría facilitar el proceso de documentación. Esto suscitó debates más amplios en todos los grupos de edad sobre las características de una evaluación eficaz.

Los docentes de la WAB, como los del SAS, comentaron que el cierre ha dado pie a algunas de las experiencias de capacitación profesional ad hoc más intensas de su carrera. Los responsables de tecnología y muchos docentes, a fin de apoyarse mutuamente, están ofreciendo y participando en talleres y tutoriales en línea de aprendizaje compartido en la plataforma WAB Lab.

Puntos fuertes del aprendizaje en línea

Ambos colegios descubrieron que el aprendizaje y la enseñanza en línea ofrecen ciertas posibilidades que difieren de las de la educación presencial.

Los alumnos y los docentes demuestran una mayor agencia. En un contexto en línea, los docentes tienen más agencia con respecto a las interacciones en el aula y más tiempo para reunirse con cada alumno y examinar sus ideas. Los alumnos pueden presentar sus ideas e intercambiar opiniones de diferentes maneras, lo que promueve tanto su independencia como sus habilidades de comunicación y presentación multimodales.

La colaboración no se ha visto afectada: “Tanto los docentes como los alumnos colaborativamente están trabajando muchísimo a través de las plataformas en línea del colegio”, explica Preis. Por otro lado, Taylor subraya que “en la WAB, apreciamos aún más a nuestros compañeros de profesión. Nos inspiramos en las comunidades de práctica que se están fortaleciendo a través de la planificación colaborativa en línea”.

Los profesores se han metido de lleno en conversaciones profundas sobre los contenidos esenciales que se deben enseñar y evaluar, y sobre cómo trasladar la integridad académica a los modos muy modernos en los que los alumnos se comunican habitualmente. “El brote epidémico de la COVID-19 ha dado pie a conversaciones sobre lo que es la evaluación y lo que constituye un indicio aceptable de comprensión”, señala Taylor. “Intentamos llegar a la idea de que la evaluación formativa es un proceso continuo que ayuda a validar otros aspectos del programa. Ahora estamos en esta fase extensa en la que tenemos que abordar la evaluación sumativa. No queremos que carezca de autenticidad”.

El aprendizaje y la enseñanza continúan y cambian

Los alumnos están encontrando formas creativas de llevar a cabo y documentar el servicio como acción, a pesar de no asistir al colegio. Los de la WAB han recaudado fondos para suministros médicos en Wuhan, y los del SAS organizaron una orquesta en línea como parte de su trabajo para el componente de Creatividad, Actividad y Servicio (CAS) del PD.

La gestión del aprendizaje que tiene lugar en línea es más eficaz e influye positivamente en el diseño de la enseñanza. Los docentes de la WAB han asumido el desafío de aprender a usar nuevas herramientas, y el cierre del colegio ha dado pie a un “renovado amor por las plataformas aptas para su uso en China, como Moodle y los blogs”. Por su parte, los del SAS están cambiando su comportamiento para responder mejor a la rápida evolución del plan de aprendizaje a distancia. “Estamos trabajando juntos como equipo, aplicando el pensamiento de diseño durante horas en vez de semanas”, comenta Preis.

El aprendizaje en línea aporta una gran cantidad de información, pero las formas en que esa información se utiliza se diferencian mucho de las de los entornos presenciales. Taylor señala: “En lugar de empaparnos con baldazos de exámenes, tenemos un río de información, que nos va cayendo como la lluvia”.

Preis colabora con el equipo directivo del SAS en el procesamiento de los datos que se recopilan en el aprendizaje en línea. Asimismo, se están desarrollando planes para examinarlos tanto en tiempo real como una vez que la comunidad escolar se haya reunido de nuevo. “¿Qué nos dicen estos datos sobre el aprendizaje y la enseñanza en el colegio, de manera más general?”, se pregunta Preis.

En definitiva, frente al brote epidémico de la COVID-19, el aprendizaje y la enseñanza continúan, evolucionan y cambian. Los colegios que han asumido el desafío del aprendizaje en línea han descubierto una simple verdad: que el aprendizaje y la enseñanza en línea son únicos y tienen sus propios puntos fuertes, que no son necesariamente equiparables a los de la educación presencial. Ante la preocupación de los colegios por que el aprendizaje y la enseñanza en línea “no sean iguales”, Preis opina lo siguiente: “Estaría de acuerdo en afirmar que no es igual, pero eso no significa necesariamente que sea peor. Es diferente”.

El aprendizaje y la enseñanza en línea suponen, cuanto menos, una gran ayuda para los colegios que tienen que cerrar sus puertas.

No se pierda otras entradas de blog sobre cómo los colegios están empleando el aprendizaje en línea a raíz del brote epidémico del coronavirus. Si desea obtener asesoramiento, descargue el documento del IB Orientación para los colegios sobre la planificación de la continuidad del aprendizaje en línea.

Comments are closed.