Hani Alrefo, jefe del departamento de Árabe del ACS Doha International School, hace una reflexión sobre los 10 atributos del perfil de la comunidad de aprendizaje del IB y su contribución al desarrollo de los alumnos durante la pandemia. Esta es la primera de dos partes de la conversación con Hani.
By Hani Al Refo 
El perfil de la comunidad de aprendizaje es el corazón del IB
La pandemia de la COVID-19 (coronavirus) ha forzado a millones de alumnos a estudiar a distancia. Los colegios y las universidades están explorando distintas soluciones para garantizar la continuidad de la educación, y tanto los alumnos como los docentes están haciendo un gran esfuerzo para adaptarse. La tecnología ha sido un catalizador para continuar el proceso educativo a través del aprendizaje en línea y mantener la comunicación entre alumnos y docentes por medio de aulas virtuales.
El énfasis en el aprendizaje virtual, a pesar de sus limitaciones y desafíos, brinda a los alumnos y los docentes del IB una oportunidad para sacar el mayor provecho de esta experiencia. La estructura de los programas del IB, la evaluación del currículo, la flexibilidad en la evaluación y el perfil de la comunidad de aprendizaje son factores clave para la continuidad de un proceso educativo de calidad a pesar de los desafíos.
La flexibilidad y el dinamismo del currículo del IB permiten que los procesos educativos funcionen en nuevos entornos de enseñanza y aprendizaje. El enfoque pedagógico del IB fomenta una metodología innovadora y prepara a los alumnos para afrontar cualquier obstáculo al aprendizaje que se les pueda presentar. El énfasis en el desarrollo de estilos de aprendizaje cubre las diversas necesidades de los alumnos, ya que el currículo del IB ayuda a mantener el proceso educativo al promover el uso de una variedad de recursos para la enseñanza y el aprendizaje.
Además, el currículo y los atributos del perfil de la comunidad de aprendizaje del IB fomentan el desarrollo de un gran número de habilidades del siglo XXI. Los alumnos que cuentan con estos atributos están mejor preparados para seguir aprendiendo en estas nuevas circunstancias que los que no cursan el IB.
«El énfasis en el aprendizaje virtual, a pesar de sus limitaciones y desafíos, brinda a los alumnos y los docentes del IB una oportunidad para sacar el mayor provecho de esta experiencia.»
Los alumnos indagadores, con su sed de conocimiento, curiosidad cognitiva y entusiasmo, pueden continuar investigando y explorando. El aprendizaje remoto no los disuade de seguir aprendiendo. Se empeñan en saciar esa sed de conocimiento, aprender y adaptarse a los cambios y los desafíos. Este tipo de alumno aprovecha al máximo todas las situaciones y facilita la tarea de los docentes.
Los alumnos informados e instruidos pueden ampliar sus conocimientos y embarcarse en nuevas áreas de estudio. Conocer su entorno les permite entender la naturaleza del nuevo contexto educativo y lidiar mejor con los problemas causados por las circunstancias actuales.
Ser pensadores les permite reflexionar acerca de los problemas y encontrar soluciones por sí mismos, sin la supervisión presencial de un docente. Su capacidad de reconocer y analizar estos problemas les da oportunidades para superar cualquier desafío y tomar decisiones sólidas.
Como buenos comunicadores, siempre encuentran canales nuevos, creativos y diversos para comunicarse con sus profesores, sus compañeros y su comunidad. La comunicación y la colaboración crean puentes y redes con otras personas, especialmente cuando las circunstancias les impiden asistir a clases en el colegio.
Los alumnos íntegros son conscientes de las circunstancias críticas y de la necesidad urgente de continuar su educación para el beneficio de toda la comunidad. También se dan cuenta de los grandes esfuerzos que hacen los docentes y los colegios para seguir educándolos y, en consecuencia, se comportan de manera honesta y responsable a pesar de no tener a un educador presente. Además, conocen sus responsabilidades en este proceso y no necesitan que se las recuerden.
Los alumnos de mentalidad abierta están preparados para aprender con herramientas y estrategias de aulas virtuales, a menudo, de formas nuevas para ellos. Están dispuestos a aprovechar las experiencias y los conocimientos de otras personas, aceptan los cambios y la innovación, y demuestran una comprensión de los nuevos métodos de aprendizaje.
Los alumnos solidarios pueden colaborar con sus compañeros y sus profesores. Se esfuerzan al máximo para ayudar a sus compañeros que necesitan recursos educativos adicionales o soporte técnico para seguir aprendiendo.
Los alumnos audaces no temen a la fluctuación ni al cambio, y se sirven de sus habilidades y su flexibilidad para superar cualquier dificultad o desafío. Cuando no hay oportunidades de aprendizaje presencial, los alumnos audaces desarrollan nuevas habilidades y perfeccionan las que ya tienen para resolver problemas y concebir soluciones. La capacidad de ser independientes mitiga la pérdida de los métodos de aprendizaje tradicionales causada por el cierre de los colegios.
Los alumnos equilibrados pueden verse menos afectados por las consecuencias del aprendizaje virtual. Prestan atención a los detalles y saben que es importante comunicarse con sus familiares y amigos, y alternar el trabajo en las clases virtuales con períodos de descanso de las pantallas y la actividad física. Su capacidad de equilibrar sus necesidades físicas y emocionales les permite ser más resilientes en situaciones de emergencia.
Los alumnos reflexivos pueden revisar constantemente los puntos fuertes y débiles de su desempeño, y reflexionan sobre lo que es importante y lo que significa ser alumno y ciudadano del mundo.
Por todo lo anterior, los alumnos que cuentan con los atributos del perfil de la comunidad de aprendizaje tienen más posibilidades de éxito en el aprendizaje virtual. Al ponerlos en el centro del proceso educativo, se desarrollan en ellos las habilidades y las características necesarias para afrontar la nueva situación y aprovecharla al máximo.
En la segunda parte de este artículo, Hani Alrefo hablará de cómo el perfil de la comunidad de aprendizaje del IB ayuda a los docentes durante la crisis de la pandemia de la COVID-19. No se la pierdan la próxima semana.
Hani Alrefo es educador y examinador del PAI y el PD, además de un poeta con una actitud de aprendizaje durante toda la vida. Dirige el departamento de Árabe y Estudios Islámicos en el ACS Doha International School. Es un apasionado de la educación con más de 20 años de experiencia en la enseñanza del árabe y los estudios islámicos para alumnos nativos y no nativos en Jordania y Catar. Siempre está buscando conocimientos y experiencias vitales.
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