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El aprendizaje-servicio y su incorporación al currículo del PAI

La educadora del IB Malikah Sheriff cuenta cómo los colegios que imparten el Programa de los Años Intermedios (PAI) pueden incorporar el servicio como acción en el currículo.

Por Malikah Sheriff 

La incorporación del servicio como acción en el aprendizaje académico suele ser una tarea ardua, pero cuando el servicio está arraigado en el ADN del colegio, se hace posible ir más allá y emprender acciones orientadas a satisfacer las necesidades. En el NIST International School, buscamos brindar a los alumnos herramientas para sacar a la luz las cuestiones que apasionan a la comunidad. Nos esforzamos por vivir de conformidad con nuestros cuatro valores fundamentales—integridad, solidaridad, comunidad y crecimiento—, y lo hacemos a través de varios grupos de servicio y proyectos dirigidos por los miembros de nuestra comunidad. Uno de los aportes más destacados del aprendizaje-servicio a nuestro currículo es nuestra unidad de emprendimiento social de Individuos y Sociedades.

La unidad de emprendimiento social

El concepto de emprendimiento social se aplica a una organización que emplea estrategias comerciales con miras a maximizar las mejoras en el bienestar humano y el medio ambiente, en lugar de las ganancias. Cuatro equipos de Individuos y Sociedades de nuestro Programa de los Años Intermedios (PAI) crearon una unidad de emprendimiento social basada en proyectos, en la que se destaca la importancia del servicio auténtico y de la transformación de las ideas en acciones significativas. El proyecto se basó en el enunciado de la indagación “El emprendimiento social puede utilizarse en beneficio de los individuos, las sociedades y el medio ambiente al satisfacer necesidades con los recursos disponibles”.

“El impacto a largo plazo de esta unidad es la transformación de las iniciativas de servicio en grupos de servicio plenamente funcionales”.

Implementación

A lo largo de unos dos o tres meses, los alumnos aprendieron los conceptos económicos básicos, como los de oferta y demanda, y modelos de sostenibilidad, como el de economía circular de la Fundación Ellen MacArthur. También se les presentaron modelos tradicionales de empresas o entidades benéficas, y se les dio una nueva perspectiva a partir de un espectro de modelos de negocios adaptado de un trabajo de John Kingston, fundador del Venturesome, el cual se describe en la figura que aparece a continuación.

Figura 1: Espectro de distintos modelos de negocios, adaptado de un trabajo de John Kingston Venturesome

Posteriormente, se les habló de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas, y se les pidió que plantearan ideas de negocios o productos basándose en los principios empresariales de la comunidad y sus necesidades reales. Después, los alumnos llevaron esos conceptos directamente a la práctica mediante la creación de un plan de negocios para su emprendimiento social, guiándose por investigaciones sobre emprendimientos similares en su área de interés. A continuación se presenta un ejemplo.

Figura 2: Ejemplo de una descripción de tareas en la que se resaltan el conocimiento y la comprensión alcanzados hasta el momento.

Lo extraordinario de esta unidad es que los inversores, los profesores y los invitados a una presentación de un emprendimiento social también pueden opinar sobre cuáles son las mejores ideas en lo que respecta al proyecto general, las probabilidades de éxito, el aporte al bienestar de la comunidad y la preservación del medio ambiente.

Picnic, líder estudiantil del emprendimiento social Yellow (que ganó el primer premio), asegura: “En cuanto al aprendizaje, esta unidad me aportó conocimientos básicos sobre el funcionamiento de los emprendimientos sociales y su potencial para desarrollar el mundo en el futuro. No sabíamos que la preservación de la abeja melífera era una cuestión tan esencial. Por eso, trabajar con nuestros apicultores fue una experiencia reveladora, que nos hizo aprender sobre los campos de Khao Yai”.

Un integrante el emprendimiento social Crush, que resultó ganador en el criterio de bienestar al promover el uso de un polvo dental sin flúor para las comunidades empobrecidas, afirma: “La unidad de emprendimiento social nos permitió explorar cuestiones que nos apasionaron, aun cuando nunca antes habíamos tenido noticia de ellas. Por ejemplo, ninguno de los integrantes de nuestro grupo sabía gran cosa sobre la cuestión de la higiene dental en las comunidades locales de Tailandia. Esta unidad nos llevó a explorar dicha cuestión, que después llegó a apasionarnos. Además, nos enseñó mucho sobre la responsabilidad social de las empresas, en especial en lo que respecta a nuestra función como ciudadanos globales del futuro”. Soroush, en representación de Crush (promoción de 2021).

“El aprendizaje-servicio es una estructura curricular que permite lograr resultados y estimula a los alumnos para que experimenten un aprendizaje auténtico que ya no olvidarán”.

Es posible que, a corto plazo, esta integración orgánica del servicio en el currículo dé como resultado la adquisición de conocimiento y comprensión; sin embargo, su aplicación en contextos del mundo real ha llevado a los alumnos a ir más allá para formar grupos de servicio permanente en la comunidad.

Impacto a largo plazo

El impacto a largo plazo de esta unidad es la transformación de las iniciativas de servicio en grupos de servicio plenamente funcionales. Los alumnos siguen respondiendo a las necesidades urgentes de las comunidades adaptando acciones sostenibles, dejando que sus ideas se desarrollen de manera natural e inspirando a muchos otros alumnos a seguir sus pasos.

A continuación se presentan algunos ejemplos de estas iniciativas de servicio que se han convertido en grupos de servicio: Yellow y Juno. Yellow es una iniciativa orientada a mejorar las condiciones de los apicultores locales y a promover el comercio justo de la miel orgánica local.

Por su parte, Juno promueve la salud y el bienestar de la mujer, la importancia de la educación menstrual y la adopción de opciones sostenibles.

Este es el grupo más activo en la actualidad; en este enlace se puede consultar su plan de negocios para el futuro.

Reflexiones finales

El aprendizaje-servicio es una estructura curricular que permite lograr resultados y estimula a los alumnos para que experimenten un aprendizaje auténtico que ya no olvidarán. Pink, que participó en el grupo Juno, afirma: “La unidad de emprendimiento social del décimo año me hizo tomar una mayor conciencia de las cuestiones relacionadas con la pobreza tal como se vive en el período menstrual, y del gran volumen de desechos generados por los productos de uso único durante la menstruación. Dado que la fabricación de protectores biodegradables (en la que centrábamos nuestra atención en ese momento) era inviable, queríamos encontrar una forma de trabajar en las mismas cuestiones de una manera que estuviese a nuestro alcance, en lugar de descartar el proyecto por completo. Fue así como se creó el grupo de servicio Juno”.

Además, estas iniciativas permiten que los alumnos asuman la responsabilidad de sus decisiones en relación con su posible impacto en las comunidades que eligen para emprender sus acciones de servicio. En esencia, esta unidad permitió alcanzar todos los resultados del Aprendizaje-servicio del PAI, ya que los alumnos trabajaron para desarrollar sus puntos fuertes en situaciones que los hacían salir de su zona de confort; pese a ello, planificaron y emprendieron acciones en colaboración, al tiempo que trabajaron en una cuestión de importancia global sin olvidar los aspectos éticos relativos al servicio que se presta a las comunidades por medio de la acción.

Malikah Sheriff es profesora de Individuos y Sociedades del PAI, profesora de Gestión Empresarial del PD y coordinadora de Teoría del Conocimiento en el NIST International School, de Bangkok (Tailandia). Malikah está persuadida de que es crucial aprender sobre el servicio valiéndose del currículo y por medio de clases o módulos independientes, en especial durante los años del PAI, para contribuir a que los alumnos logren una profunda comprensión de lo que ella denomina “los principios esenciales del servicio”.

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