Los amigos y la familia desempeñan un papel importante en la vida de un alumno. Hemos pedido a varios graduados del Programa del Diploma que reflexionen sobre un momento en el que alguien que conocieran influyera positivamente en su educación. Obtenga más información sobre la red de exalumnos del IB en ibo.org/es/alumni.
La lección que aprendí es que la confianza en sí mismo es lo que más conviene, siempre y cuando vaya acompañada de humildad.
Contribución de Ocie Marie Grimsley
El mundo es un lienzo en constante cambio con raíces difusas y una historia basada en rumores. La única forma de conocer el pasado es a través de las huellas que vemos en diferentes lugares. Podemos aceptar sus historias, pero nunca llegaremos a conocer la verdad absoluta. Y no pasa nada. Es parte de la diversión y de nuestro viaje.
En el contexto del mundo tan extraño y atípico que nos rodea, el Bachillerato Internacional (IB) me ayudó a convertirme en una persona capaz de resolver problemas teniendo todos los factores en cuenta. Recuerdo cuando leía artículos académicos y otras lecturas obligatorias en la universidad e identificaba las falacias lógicas que estudié en Teoría del Conocimiento (TdC). Cada vez que leo algo, busco pistas contextuales que pueden pasar inadvertidas para otras personas. Luego las contrasto e investigo más a fondo para tratar de llegar a la verdad.
Mis creencias, por muy “estúpidas” que sean, determinan quién soy.
Pero antes de matricularme en el PD, en el colegio me habían puesto un mote que conocía todo el condado: “Grimsley la ingenua”. En cierto modo era verdad. Era una “extraña” en la educación intermedia que solo quería ser aceptada, pues era la nueva. Era insegura, así que aprovechaba cualquier ocasión que tenía para hacer amigos. Me creía todo lo que me decían porque no sabía nada sobre el condado o la comunidad en ese momento.
En primaria forjé una amistad a la que me aferré porque compartíamos una historia parecida (de hecho, han pasado diez años y la amistad perdura). Más tarde, en la educación intermedia, me hice amiga de otra persona que pensé que podría ayudarme a conocer mejor la comunidad. Y así fue, pero también aprendí una importante lección de nuestra amistad ya extinta.
Esa amistad fue importante porque la lección que aprendí me ha acompañado desde que se separaron nuestros caminos. Asistíamos a las clases del IB y participábamos en actividades extracurriculares que nos ocupaban mucho tiempo y nos motivaban, cada una a su manera. Pero en el último año, tomamos caminos diferentes y dejamos de encajar. Las cosas cambian. No revelaré su nombre, pero sí la lección que me enseñó. Además de apoyarme en las clases del IB, me ayudó a darme cuenta de que mis creencias, por muy “estúpidas” que sean, determinan quién soy. Y si cambio, ya sea para mejor o para peor, no pasa nada.
La lección que aprendí es que la confianza en uno mismo es lo que mejor nos sienta, siempre y cuando vaya acompañada de humildad.
En el Programa del Diploma, me animaron a utilizar mi propio pensamiento, mi propia forma de resolver los problemas en los proyectos de Creatividad, Actividad y Servicio (CAS) y mi propio lenguaje en las presentaciones orales de evaluación interna. No había un guion palabra por palabra, sino un esquema. Me encontré a mí misma a través de una antigua amistad y el IB. Encontré y desarrollé a la “verdadera” Ocie. Al fin y al cabo, la verdad se asemeja a la autenticidad: ambas son indiscutibles y variables.
Descubrí que disfruto con un buen debate e investigando lo que las personas quieren decir, y que mi manera más creativa de aprender es a través de la música. Aunque no estudies el programa completo, puedes aprender algo de ti mismo al participar en uno o dos cursos del IB.
¿Cuál es tu verdad oculta? ¿Qué te ayuda a confiar en ti mismo? Me gustaría saberlo.
Ocie Marie Grimsley obtuvo el diploma del IB en el Clarke County High School en 2015. Actualmente cursa estudios de grado en lengua inglesa en la Universidad George Mason, sigue cultivando su pasión por el aprendizaje y espera poder animar a otras personas a romper el molde y redefinir los límites con un pensamiento original. En la actualidad, está realizando prácticas profesionales en el Bachillerato Internacional como asistente de comunicaciones con exalumnos.
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