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Proyectos de cambio creativos

group-v-creative-7Los docentes y alumnos del IB están ideando maneras originales de crear conciencia sobre los problemas del mundo real, según investigaciones de la revista IB World

Los alumnos del IB de todo el mundo están poniendo voz a las comunidades que no la tienen. Se están sirviendo del poder de la narración para entablar conversaciones significativas sobre dos problemas del mundo real.

Encarcelación masiva en EE. UU.

Los centros penitenciarios de EE. UU. albergan a más de dos millones de reclusos. El número de personas encarceladas que no son de raza blanca es desproporcionadamente elevado. Amnistía Internacional prevé que uno de cada tres hombres de raza negra irá a prisión si la tendencia actual continúa.

La encarcelación masiva es una cuestión de derechos humanos muy debatida en EE. UU. Las manifestaciones civiles han provocado la abolición de muchas leyes y la modificación de algunas prácticas.

En año pasado, en señal de protesta, un grupo de alumnos de Teatro del Programa del Diploma (PD) del United Nations International School (UNIS) de Nueva York (EE. UU.) preparó una obra como parte del proyecto Picture Justice del colegio. Por medio del baile, la interpretación musical y el movimiento, los alumnos contaron la historia de varias personas que habían estado en prisión y destacaron las desigualdades del sistema penal estadounidense.

creative-for-change-4Por ejemplo, hay una escena que se centra en la historia real de Kalief Browder. Se trata de una pieza de siete minutos basada en un artículo del New Yorker donde se contaban los horrores del confinamiento en soledad y se exponían las leyes de encarcelamiento de jóvenes problemáticos y la pérdida gratuita de una vida. Parte de la escena se presenta mediante la lectura del artículo y otros momentos se representan por medio del movimiento.

“La creación de esta producción proporcionó a los miembros de nuestro grupo una comprensión mucho más clara del impacto humano de la encarcelación masiva, y les brindó la confianza necesaria para hablar de ello con sus compañeros y frente a un gran número de adultos que tienen opiniones diferentes sobre el tema”, afirma Kiara Downey, directora del departamento de teatro y artes interpretativas.

El proyecto Picture Justice fue una idea original de Abby MacPhail, profesora de Política Global del PD. Su intención era que los alumnos de secundaria estudiaran los temas de justicia social mediante retratos y entrevistas en primera persona. MacPhail trabajaba con Downey, que asumió la dirección del componente de artes interpretativas del programa en 2014.

Los alumnos solo disponían de ocho semanas para preparar la obra. Adaptaron transcripciones de entrevistas y crearon la obra a partir de historias contadas palabra por palabra, grabaciones de video y una selección de artículos de revistas y periódicos. Algunos miembros del grupo se reunieron con personas que habían estado en prisión y con activistas involucrados en la labor de poner fin al problema.

“Estos alumnos no tardaron en formar un grupo muy unido que representaba los cuatro cursos de nuestro colegio y 11 nacionalidades diferentes”, explica Downey. “Muchos de ellos no eran ciudadanos de EE. UU. y, aunque vivían en Nueva York, enfocaron la cuestión desde una perspectiva externa”.

La obra también se representó ante un grupo de artistas y educadores en el New York University Forum for Arts in Education (NYU) de 2016, y fue un rotundo éxito.

Eva Kashuk, alumna de Teatro del IB de Nivel Superior, trabajó con Downey como directora de alumnos y ahora estudia en la universidad con la intención de especializarse en un programa de justicia social. También espera continuar con su trabajo en el teatro de difusión. Otros alumnos participantes en el proyecto Picture Justice han dado charlas en reuniones locales y se han unido a grupos de activistas de la comunidad para impulsar el cambio.

Tres nuevos alumnos de Teatro del IB se han incorporado a la clase para poder participar en el proyecto del próximo año, y otros se han matriculado en Política Global del PD para estudiar temas de justicia social.

Este año, el proyecto Picture Justice se centrará en la inmigración en EE. UU.

La crisis global de los refugiados

creative-for-change-3El Moraitis School de Atenas (Grecia) también se ha servido del teatro para hacerse eco de un tema de actualidad: la crisis de los refugiados. Hasta el momento, el colegio ha recaudado aproximadamente 1.000 euros para Solidarity Now, una organización que proporciona apoyo legal y psicosocial a los refugiados que llegan a Salónica y el norte de Grecia.

La obra titulada The Sea – or Syria, que se representó por primera vez en un centro artístico de Atenas, retrata el momento en el que Europa “cerró sus puertas” y dejó a 58.000 refugiados atrapados en Grecia. En ella se cuenta la historia de una familia siria que asume serios riesgos para cruzar la frontera hasta Turquía. Pagan a contrabandistas para que los lleven en barco a una de las islas griegas, pero solo consiguen quedarse atrapados en las miserables condiciones del campamento de Idomeni.

“La crisis de los refugiados ha sido un acontecimiento grave e importante que ha tenido mucha repercusión mediática en Grecia. Parecía bastante obvio que era un tema que había que tratar pero, en el momento en que empezamos, no era consciente de que se iba a convertir en algo tan grande”, afirma Anthony Stevens, antiguo profesor de Teatro del PD.

life-jackets-creative-for-change-2La obra no terminó con un final feliz sensacionalista, puesto que era un retrato de la cruda realidad de los refugiados y la cantidad de vidas que se han perdido en el mar. Había muchos personajes y los alumnos se metieron en la piel de refugiados de Iraq, Afganistán y Bangladesh. También se analizó la diferencia entre los refugiados y los migrantes económicos.

The Sea – or Syria tardó aproximadamente cinco meses en planificarse y exigió a los alumnos una labor de investigación de la crisis muy detallada y, con frecuencia, dolorosa. Los alumnos visitaron el campamento de refugiados de Eleonas, situado en Atenas y gestionado por el gobierno, y el campamento de refugiados extraoficial del puerto del Pireo, donde llevaron comida y juguetes.

“Aprendimos mucho de las conversaciones que tuvimos, lo cual nos fue de gran ayuda para documentar la obra. Los alumnos también estaban al tanto de las noticias. Buscaron todas las historias que pudieron e intentaron convertirlas en escenas”, afirma Stevens.

“El período de investigación para una obra suele durar unos tres meses, pero el peso de la responsabilidad era mucho mayor en este caso”, añade. “Los alumnos y yo sentíamos la necesidad de hacer las cosas bien y terminamos produciendo una obra de mayor envergadura. El objetivo de esta representación era concientizar lo máximo posible al público, no solo a los alumnos participantes”.

creative-for-change-1La representación de un tema de importancia real ayudó a los alumnos a pensar acerca de la relación del teatro con cuestiones más amplias. “La idea era crear una obra en la que pudieran explorar en qué consiste el teatro y qué efectos pueden producirse a través de una obra. Analizamos cuestiones tales como si el teatro sirve solo para entretener o se puede utilizar como una herramienta con la que poder obtener una perspectiva del mundo”.

“Al mismo tiempo, los alumnos pudieron comentar situaciones del mundo real y contribuir mediante la concientización y la recaudación de fondos”, señala Stevens.

Los alumnos afirman que este proceso los transforma, no solo en lo que respecta al conocimiento y la comprensión de la situación, sino también en otros aspectos más profundos y personales.

“Les ha hecho darse cuenta de lo frágil que puede ser cualquier situación”, apunta Stevens. “Si eso sucede en Siria, también puede suceder aquí. Ahora son conscientes de sus privilegios y comprenden algo que es fundamental: ver las noticias no basta para entender bien una situación. Es algo que no se logra hasta que no se intenta empatizar de verdad. Han pasado de ver a los refugiados como vidas ajenas a descubrir que, en el fondo, son personas como ellos”.

La respuesta fue tan positiva que la obra volvió a representarse en un teatro municipal al aire libre y en el Benaki Museum.

En el otro extremo del mundo, en China, los alumnos de Inglés del PD del Beijing National Day School hicieron una campaña de anuncios de servicio público para concientizar del drama de los refugiados sirios, como parte de su estudio de los medios de comunicación de masas. Trabajaron en colaboración con el United States Committee for Refugees and Immigrants (USCRI), una organización de reasentamiento.

psa-dream-poster-alex-chloe-katherine-karry-stephanyComo preparación, la clase dedicó tres días a estudiar artículos, escuchar entrevistas y leer blogs sobre la crisis de los refugiados sirios. También compartieron reflexiones en las que explicaron cómo debe sentirse alguien que se ve obligado a abandonar su hogar. Los alumnos vieron anuncios de servicio público y utilizaron el análisis y la interpretación del texto visual para indagar sobre qué los hacía particularmente eficaces. Con esta información, trabajaron en pequeños grupos para diseñar sus campañas.

Se crearon varios anuncios de servicio público impresos y en video. Los alumnos se encargaron de grabar, compilar y editar todo el metraje, y de componer la música original. El USCRI seleccionó uno de esos anuncios para publicarlo en su página de Facebook.

Según Matthew Goetz, profesor de Lengua y Literatura (Inglés) del IB: “Todo el trabajo realizado por mis alumnos aborda cuestiones del mundo real de ámbito local, regional y global. De eso se trata la verdadera educación, de rechazar la separación entre la vida dentro y fuera del aula. Así es como los alumnos adoptan los atributos del perfil de la comunidad de aprendizaje del IB y aprenden a convertirse en agentes del cambio global mucho antes de graduarse”.

Los alumnos siguen trabajando en iniciativas de concientización mediante la venta de una antología poética que incluye varias composiciones sobre los refugiados sirios creadas por ellos mismos. “Además de ser un proyecto de CAS excepcional, el volumen final de 120 páginas sigue poniendo voz a las dificultades globales que afrontan los refugiados sirios y sirve para recaudar fondos para los problemas locales de Pekín. En su plan de negocio, los alumnos describen cómo todos los fondos se destinarán a una organización dedicada a la educación de niños cuyos padres están en prisión”, afirma Goetz.

No deja de sorprenderme la devoción que tienen mis alumnos por el trabajo auténtico. Me motivan para ser mejor profesor y me recuerdan por qué la enseñanza es la mejor profesión del mundo.