La alumna del Programa del Diploma (PD) Ling-Ling es la fundadora de Cube Care, una organización que ha mejorado las condiciones de vida de 900 aldeanos de Tailandia, aunque su trabajo no termina ahí.
Karnsiree (Ling-Ling) Chen decidió que tenía que hacer algo cuando, durante su clase de Geografía, descubrió la brecha sanitaria que había entre las áreas rurales y urbanas de Tailandia. “Los estudios de caso que tratamos en clase me abrieron los ojos a algunas cuestiones globales. Nosotros disfrutamos de las oportunidades que nos ofrece un buen sistema educativo, así que pensé que teníamos que hacer lo que estuviera en nuestra mano para ayudar a la comunidad”, cuenta la alumna del PD del Bangkok Patana School (Tailandia).
Ling-Ling fundó Cube Care con un equipo de cinco compañeros con el objetivo común de proporcionar atención sanitaria especializada a comunidades de aldeas aisladas y guardas forestales. Lo que comenzó como un proyecto de creatividad, actividad y servicio (CAS) se ha convertido en una organización de 60 miembros presidida por Ling-Ling. Los otros cuatro miembros fundadores son Ann Kanchanasakdichai, Chayapat (Cue) Chinthammit, Tinn Habanananda y Pasawat (Tang-Tae) Sakulpanich.
Mejorar las condiciones de vida
Ling-Ling se puso en contacto con un coronel y su equipo de soldados tailandeses para identificar las aldeas que necesitaban atención sanitaria especializada. “Quería asegurarme de que el proyecto prestara ayuda directa a la comunidad, y la manera de lograrlo era mantener una comunicación continua con los representantes de las aldeas”.
El año pasado, la organización dotó de filtros de agua a la aldea de Baan Nam Phu, en Kanchanaburi, donde no había electricidad y el agua estaba contaminada de cal. Cube Care recaudó 40.000 bahts (unos 1.200 dólares) para construir un filtro de agua mediante la venta de dulces en mercados rurales y la ayuda de varios donantes.
“Diseñamos un filtro de agua sustentable que funciona con la fuerza de la gravedad”, explica Ling-Ling. “Para construirlo en la aldea, contamos con la ayuda de soldados tailandeses. El sistema de cuatro tanques está formado por varias capas de gravilla, sedimento y carbón, y es capaz de producir 300 litros de agua al día, lo cual supone una mejora de las condiciones de vida de 900 aldeanos. Con el dinero sobrante, instalamos luces accionadas por energía solar en la guardería de la aldea y en los baños de mujeres”.
“El nivel de independencia, creatividad y liderazgo demostrado en el proyecto Cube Care es admirable y representa los valores que queremos inculcar en nuestros alumnos.”
En un principio, Cube Care quería proporcionar filtros de agua eléctricos, pero su precio era demasiado elevado. El equipo no tardó en darse cuenta de que un sistema de filtrado de agua sustentable va más en consonancia con sus valores de preservación del medio ambiente, al utilizar materiales naturales en lugar de productos químicos como la lejía. “El filtro también tiene un funcionamiento muy sencillo. Cuenta con válvulas de fácil acceso para desechar los residuos. La única tarea de mantenimiento de gran envergadura es el reemplazo del carbón cada seis meses, cuando empieza a perder su eficacia”.
Según Keith Wright, responsable del currículo de Geografía, el equipo de Cube Care ha sido una enorme fuente de inspiración para todos: “El nivel de independencia, creatividad y liderazgo demostrado en el proyecto Cube Care es admirable y representa los valores que queremos inculcar en nuestros alumnos. El grupo ha demostrado mucha compasión y empatía hacia los más desfavorecidos y siento un enorme orgullo por todo lo que ha conseguido”.
El futuro
Cube Care tiene el propósito de llevar a cabo un proyecto importante cada año que atienda de forma directa las necesidades de una comunidad. Con su segundo proyecto, está recaudando fondos destinados a sufragar un desfibrilador externo automático, glucómetros, limpiadores nasales y otros equipos médicos para los 769 habitantes de la aldea de Pa Mak, en la provincia de Prachuap Khirikan. Hasta el momento, el equipo ha recaudado 14.000 bahts (unos 440 dólares) mediante la venta de bolsas de tela diseñadas por el equipo artístico del Bangkok Patana School.
Gracias a su alianza con el equipo de soldados del coronel, Cube Care cuenta con una buena base para seguir trabajando con otras aldeas después de que Ling-Ling y los miembros fundadores se gradúen.
“Cuando pusimos en marcha el proyecto de CAS, mi deseo era que siguiera contribuyendo a la sociedad en el futuro. Nos hemos asegurado de crear una estructura sólida y animamos a todos los miembros a que se presenten para ocupar cargos directivos. La dirección se renovará muy pronto, y tengo fe en que nuestros sucesores seguirán cumpliendo nuestra misión durante muchos años”.
El equipo de Cube Care con el coronel.
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