El docente Hemal Panchal del Oberoi International School (India) nos cuenta cómo los alumnos renovaron su propia aula y mejoraron así su aprendizaje.
Lo que comenzó como una unidad de indagación sobre “cómo compartimos el planeta”, se transformó en un verdadero desafío de rediseño del aula para los 38 alumnos del Programa de la Escuela Primaria (PEP) del Oberoi International School (India). A medida que los alumnos hablaban acerca de cómo compartían el planeta, surgió un debate sobre cómo podrían compartir los espacios de aprendizaje de una mejor forma. De este modo, los alumnos decidieron que era necesario rediseñar el aula para mejorar sus experiencias de aprendizaje.
El plan
Para empezar, los alumnos evaluaron sus espacios de aprendizaje actuales y las instalaciones con las que ya contaban. Luego, hicieron una lista de las cosas que querían añadir y las clasificaron en “indispensables” o “ideales”.
A fin de crear espacios de aprendizaje seguros, estimulantes y atractivos, los alumnos deseaban incluir los siguientes elementos: un área para grabar audios; un sector para resolver problemas matemáticos desafiantes; un espacio para expresarse artísticamente; un cesto de basura reciclable; un rincón de lectura; un sector de juegos; áreas de colaboración grupal, y un espacio para crear materiales de exhibición que reflejaran su proceso de aprendizaje.
El segundo paso fue pensar posibles distribuciones del espacio que respaldaran ese rediseño. Los alumnos realizaron un debate en el aula, desplazaron muebles y discutieron todas las propuestas sobre cómo organizar el espacio. También formaron pequeños grupos para poner a prueba las sugerencias, realizaron lluvias de ideas y llegaron a varias conclusiones. Un alumno señaló: “Es importante tener los elementos de la unidad de indagación en varios espacios porque hacemos referencia a ellos constantemente”.
Otro alumno dijo: “Sería fantástico tener citas en las paredes porque nos servirían de motivación”.
También decidieron que los acuerdos esenciales del aula no deberían estar todos juntos, sino que habría que situarlos en sus lugares correspondientes. Por ejemplo, el acuerdo “cuidaremos el material” debería estar en el lugar donde se guardan los materiales. También decidieron armar un rincón para celebraciones, con trabajos artísticos, acciones, fotografías y logros.
En ese momento, nuestra unidad de escritura era la escritura persuasiva. Por lo tanto, los alumnos utilizaron sus nuevas habilidades de persuasión para preguntarle a sus padres si podían traer de casa objetos para decorar los espacios, como guirnaldas de luces para el rincón de lectura, sábanas decorativas para crear carpas, objetos reciclables para construir cajas de papelería, y juegos.
Los alumnos estuvieron felices con el resultado. Trabajaron juntos para rediseñar y mejorar sus espacios de aprendizaje, de los cuales todos se podrían beneficiar. Demostraron una resolución de problemas orientada a la acción, así como creatividad y trabajo en equipo.
Reflexión
La reflexión es una parte fundamental del aprendizaje. Se pidió a los alumnos compartir tres cosas que hubieran aprendido; dos cosas que les hubieran parecido interesantes; una cosa que quisieran tener para mejorar su aprendizaje, y los próximos pasos que dar. Algunas de las respuestas fueron “aprender a trabajar con otros de la mejor manera posible” y “encontrar formas de adaptarse a los nuevos espacios”.
Mi reflexión como docente es igualmente importante. Aprendí que los alumnos pueden asumir la responsabilidad de sus propios espacios de aprendizaje y elegir dónde quieren aprender, y que esto genera mayor fluidez en la dinámica del aula. También descubrí que los alumnos que están comprometidos en el plano emocional mantienen una participación más activa en su aprendizaje. Asimismo, noté que la tarea estimuló el trabajo independiente entre los alumnos y los animó a utilizar diferentes materiales de aprendizaje.
El diseño y la creación de espacios de aprendizaje pueden ser parte de una indagación. Mis recomendaciones a los docentes que quieran realizar un proyecto similar con sus alumnos son:
- Reduzcan su intervención.
- Siempre soliciten contribuciones e ideas de sus alumnos: las aulas tradicionales no se ajustan al aprendizaje moderno, así que quiten de ellas lo que no se necesite.
- Creen espacios de colaboración: todos los espacios pueden ser espacios de aprendizaje, incluso los pasillos.
- Generen espacios de creatividad y recurran siempre a la reflexión.
Los espacios de aprendizaje flexible deben promover un equilibrio entre las experiencias a fin de facilitar los enfoques del aprendizaje y promover la realización de elecciones, la toma de decisiones y la independencia.